Luego de conquistar por tercera vez la Copa Libertadores, en el primer semestre del nuevo milenio, la marca de indumentaria que vestía a Boca Juniors se propuso nuevos objetivos. El equipo que dirigía Carlos Bianchi apuntaba todos los cañones a conquistar el Torneo Clausura y la Copa Intercontinental ante el Real Madrid en diciembre. La empresa de la pipa, en su afán de dar un golpe en el mercado, diseñó como tercer opción para disputar la Copa Mercosur una camiseta similar a la tradicional, con una franja en el medio, pero con la particularidad de que los colores elegidos fueron el gris metalizado, y azul oscuro para la banda central, con la publicidad en amarillo.
El debut de esta particular camiseta se dio el 2 de agosto del año 2000, en el primer partido que Boca disputó en el segundo torneo continental en el escalafón de importancia, ante Olimpia de Paraguay en el estadio Defensores del Chaco. Tras un debut auspicioso en el torneo doméstico con una goleada por 4-0 a Argentinos Juniors tres días antes en la Bombonera, con goles de Chrsitian Giménez, el “Patrón” Bermúdez, el “Chipi” Barijho y Martín Palermo, el “Virrey” utilizó en tierra guaraní un mix entre titulares y suplentes. La formación de esa noche fue: Abbondanzieri; Ibarra, Medina, Bermúdez, Faggiani; Marchant, Battaglia, Pinto, Andrizzi; Delgado y Palermo.
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Battaglia festejando el gol del triunfo |
El partido, chato, se aferraba al 0-0, y encima a falta de 15 minutos para el final del partido, una niebla espesa se esparció por todo el terreno del juego e hizo imposible seguir el transcurso del encuentro, ya que al gris de la camiseta de Boca, se le sumó el blanco y negro del tradicional uniforme “Decano”. A cinco minutos del final, y mientras desde el banco visitante se preguntaban cuando se iba a suspender el partido, Sebastián Battaglia ingresó en el área con la pelota dominada, buscó una pared con Marcelo Delgado que lo dejó mano a mano contra el arquero Tavarelli, definió con pierna derecha ante el achique del portero paraguayo y la pelota ingresó en el arco tras pegar en el palo derecho. Fue el único gol del cotejo y decretó la victoria para Boca Juniors en el primer partido de la fase de grupos, cuando parecía que empate era el resultado más lógico. A pesar de no alcanzar el éxito que deseaba la marca de ropa norteamericana, volvió a intentarlo con los mismos colores para los años 2001 y 2010, con iguales resultados de poca aceptación por parte del público xeneiza, pero seguramente algunos hinchas aún guarden alguna de estas piezas históricas en su placard.
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