El delantero argentino Paulo Dybala y el croata Mario Mandzukic llegaron a la Juventus en el mercado de pases del verano del 2015 y en su debut contribuyeron con un gol cada uno en la victoria de su equipo en la final de la Supercopa de Italia ante la Lazio.
Como es común en Europa, antes del comienzo del calendario de la temporada de las ligas locales, se disputa el trofeo de la Supercopa, que cruza a los ganandores de la Liga y la Copa del año anterior, y es el primer trofeo que se pone en disputa. En esta ocasión en Italia, la Juventus última ganadora de la Serie A, debía dirimir el título ante el último campeón de la Copa Italia, la Lazio. En el mercado de pases anterior a este partido la Juventus había adquirido al delantero argentino Paulo Dybala, proveniente del Palermo del mismo país y al delantero croata Mario Mandzukic, que llegaba luego de una temporada en el Atlético Madrid del “Cholo” Simeone. Ambos tuvieron su debut con la camiseta de la “Vecchia Signora” en esta mencionada final y con un tanto de cada uno la Juventus levantó el trofeo por séptima vez en su historia en el estadio Shangai Stadium, en China.
A los 24 minutos del segundo tiempo, Mario Mandzukic cabeceó un centro de Stefano Sturaro para marcar el 1-0, y cuatro minutos más tarde, Paulo Dybala, quien había ingresado a los quince del segundo tiempo, recibió en el centro del área un pase del francés Paul Pogba, y con un remate de zurda fusiló al arquero Marchetti que nada pudo hacer para evitar el 2-0 y el título para el “Bianconeri”.
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